La piedra de El Marial se encuentra a unos once kilómetros de la zona urbana de El Peñol. Es tan viejita que a su edad se le calculan unos 70 millones de años, pero eso no importa si se tiene en cuenta que su historia se ha escrito recientemente.
Los primeros pobladores la llamaban Piedra Gorda, posteriormente se le conoció como Dos cabezas y en la actualidad recibe el nombre de El Marial, en honor a la virgen que, dicen, por allí hizo su aparición.
El párroco de la localidad José Manuel Giraldo explica que en 1903, el padre José Dolores Giraldo tuvo una visión en la que la virgen le pedía que esa roca fuera un santuario consagrado a ella.
El sacerdote empezó a dedicarle mucho tiempo a esa vereda y pretendía construir allí un templo. “Su propósito era hacer que El Peñol fuera trasladado a ese lugar y que en el futuro existiera el pueblo de “Marialía”, explica el párroco.
“Desde ese momento comenzó a construir una torre, un campanario, unos arcos y unos cuantos pórticos, donde seguramente estaría la casa cural. Él trazó lo que sería la futura plaza del pueblo”, argumenta Nevardo García, director de la Fundación Amigos del Museo.
Pero su entusiasmo se vio opacado con los rayos y truenos que caían y lo destruían todo, el padre veía en eso la acción del demonio y más tarde en un sermón eucarístico dijo que algún día un gran dragón se tragaría al Peñol. Pero murió con la frustración de no poder construir la ciudad.
En 1904 iniciaron las peregrinaciones marianas pero en 1.909 el arzobispo de la época suspendió el santuario, según él, por los desórdenes que se presentaban.
Gracias al trabajo de varios sacerdotes, entre ellos el obispo diocesano Alfonso Uribe Jaramillo, en 1986 se autorizó de nuevo la celebración y El Marial volvió a ser el lugar de peregrinación que existió en un principio. La Divina Pastora, como popularmente se conoce, siguió favoreciendo con milagros a sus fervorosos devotos.
Desde entonces todos los primeros sábados de cada mes se realiza una misa en el lugar, pero una vez cada año, en el último sábado de mayo, sucede la gran peregrinación que atrae a cientos de personas. Por eso, los propios dicen que la devoción que por la virgen se guarda en esta localidad es más grande que El Peñón de Guatapé y la Piedra de El Marial juntas.
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| La verdad es que desde lejos parecen las jorobas de un dromedario. Pero hay otra certeza que muchos desconocen: es la verdadera piedra de El Peñol. La más famosa está ubicada en Guatapé. |
Resumen: La historia de la comunidad de El Peñol se narra desde 1.654, por esta época se presenta en la región el Misionero Fray Miguel de Castro y Rivadeneira, oriundo de Galicia España, quien fue enviado a recoger unas limosnas para el sostenimiento de los lugares santos.
Son dos rocas similares al Peñon de Guatapé. tiene una fuente de agua a la que le han atribuido propiedades curativas y milagrosas.
Es considerada como una floración de batolito antioqueño (Se llama batolito a una gran masa de rocas intrusivas ígneas, normalmente granito, de la que no se puede observar su terminación en profundidad). Y está situada al norte del municipio y cada año es sitio de peregrinación dedicado a la divina Pastora en el mes de abril. Antiguamente se llamó "Piedra Gorda " y desde principios de siglo XX tomó el nombre del Marial. en este lugar se quiso contruir un poblado que se llamara "Marialia" en honor a la Virgen María, pues el padre José Dolores Giraldo tuvo una visión o sueño con la Virgen María y desde entonces luchó de manera incansable por construir una capilla, pero murió sin cumplir su objetivo.
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La Piedra del Marial está ubicada a 12 Kms de la cabecera municipal en la vereda "El Marial". Es un sitio propio para a perigrinaciones, y su atractivo es disfrutar de los hermosos paisajes y de los diferentes deportes de aventura como puenting, escalada y canopy. Al lugar puede dirigirse en carro, caminando o a caballo.
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